UN SANTUARIO, DONDE HABITA EL SEÑOR EN MEDIO DE SU PUEBLO.

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Éxodo 25:8 Reina-Valera 1960  8 Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos. 

Un solo tabenaculo tenía el pueblo de  Israel, todos ellos habian ayudado con sus ofrendas a levantar el lugar santisimo, el lugar santo y los atrios donde se congregaba toda la descendencia de Jacob.

El tabernaculo, era una tienda donde la gloria de Dios se manifestaba, y era llevada de lugar en lugar, hasta los tiempos del rey Salomón , cuando se levantó el primer templo. (año 586 a.C.). Luego se levantó el segundo templo. "Hamikdash Hasheni" cuya construcción duró 46 años, según lo dicho por los Judios en el evangelio de Juan 2:20. y terminada a principios del siglo I. supuestamente cuando el Señor era solo un niño, tomando como base, la evidencia del año (1) uno y el años (100) cien, que es el primer siglo. d.C.

Si calculamos que Jesús tenia  33 años en el tiempo de su muerte. la destruccion del segundo templo fue alrededor de 37 años despues de su resurrección. Por el imperio romano, bajo el dominio del emperador Vespasiano. En el año 70 d. C. Profesia de nuestro señor Jesucristo dicha en Mateo 24:1-2. "Respondiendo él, les dijo: ¿Veis todo esto? De cierto os digo, que no quedará aquí piedra sobre piedra, que no sea derribada." RVR1960.

Jesucristo aseguró que su cuerpo era el templo de Dios, es decir Jesus es el perfecto templo donde  habita la plenitud de Dios. 

El templo es la casa de Dios, ese tabernaculo, que tenia en el decierto un lugar Santisimo donde entraba el Sumo Sacerdote una vez por año. Hebreos 9.

Si el templo de Dios está donde está Jesús, entonces hay que invocar a Cristo, nuestro mesias resucitado, para reunirnos en su nombre, como está escrito Mateo 18.20: " porque allí donde están dos o tres congregados en mi nombre estpy yo en medio de ellos". espiritualmente hablando. Mas os digo que esa casa, ese templo vendrá fisicamente desde el cielo. según lo dicho en revelaciones 21:2.

"Y yo Juan vi la Santa Ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido. Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios. Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron. Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas. RVR1960.

Anunciemos y Esperemos, la venida gloriosa de nuestro Señor Jesucrito, el hoy único y enterno Sumo Sacerdote.  El Unico Rey de Reyes y Señor de Señores, en otro no hay salvación.

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